Boda entre personas de diferentes religiones: Cómo resolver el potencial conflicto

Boda entre personas de diferentes religiones

Uno de los aspectos más complejos a la hora de planificar una boda entre personas de diferentes religiones o tradiciones culturales. Ambas familias esperan que se sigan sus ritos y pueden sentirse heridos si no se tienen en cuenta. Este potencial conflicto puede incrementarse si además dejamos que las familias opinar sin control, sin atender a los deseos de los novios.

En este artículo se exponen algunas estrategias para afrontar estas situaciones difíciles relacionadas con las bodas entre personas de diferentes religiones y culturas.

Bodas mixtas

No vamos a descubrir la pólvora, aunque pensándolo bien, no creo que sea este un material muy pacificador 😉, pero estarás conmigo que la mejor estrategia para superar las diferencias culturales entre las familias es mantener una mente abierta y discutir con asertividad sin posiciones rígidas. Los matrimonios entre distintas confesiones son cada vez más frecuentes y todos los aceptamos con naturalidad. Lo importante es conciliar esas creencias, el matrimonio y el amor.

Hay que ser creativos para dar cabida a las dos culturas de modo que nadie se sienta herido o ninguneado. En el caso de diferencias religiosas, son sus líderes oficiantes quienes más pueden desempeñar un compromiso que haga felices a ambas partes. La mayoría de los líderes religiosos se han enfrentado a este tipo de situaciones en el pasado y pueden tener una serie de buenas ideas sobre cómo se puede estructurar una ceremonia que incluya a ambas religiones. 

 

Los ancianos de la familia pueden desempeñar el mismo tipo de papel en situaciones en las que las diferencias entre las familias son culturales. Si un representante de cada familia trabaja con la pareja para planificar la boda, lo más probable es que se llegue a un compromiso justo para los planes de boda.

Estrategias para el negocio de organizador de bodas

Habrá ocasiones en las que la pareja se vea obligada a tomar decisiones muy difíciles en el transcurso de la planificación de su boda. En particular, si la religión de uno de los miembros de la pareja tiene normas estrictas y específicas sobre las ceremonias de boda. En estos casos, la pareja tendrá que decidir si está dispuesta a seguir esas normas.

Delegar la planificacion de la boda

Por ejemplo, algunas religiones pueden no permitir que los no miembros sean testigos de la boda. Esto significaría que, si la pareja se casa en una ceremonia dentro de una iglesia concreta, sólo podría asistir una parte de la familia. La pareja tendrá que decidir si esto es aceptable para ellos o no. Puede que estén muy convencidos de casarse en esa iglesia y estén dispuestos a hacer este sacrificio o puede que sientan que excluir a una parte de la familia no es aceptable.

En este caso, considerar la posibilidad de celebrar dos ceremonias con sus ritos característicos puede ser la mejor solución.

Esto puede parecer excesivo, pero si hay muy pocas posibilidades de que las dos familias puedan llegar a un acuerdo y comportarse civilmente, merece la pena dar este paso. Así, cada parte de la familia tendrá exactamente lo que quiere. Además, los futuros novios sentirán que no tienen que tomar decisiones que puedan molestar a sus amigos o familiares. Puede que sea más trabajoso planificar dos ceremonias y recepciones de boda, pero a la larga ahorrará a la pareja una gran cantidad de estrés.

Aunque no hay nada malo en tener detalles de boda geniales, es importante recordar que todas esas “cosas” de los detalles son secundarias con respecto a la razón por la que estás haciendo todo esto en primer lugar: Celebrar que vas a pasar el resto de tu vida con la persona que amas.

Así que, por difícil que sea, intenta no dejarte arrastrar por esa naturaleza competitiva y recuerda que ese día te vas a casar con tu otra mitad perfecta. Y eso importa más que cualquier otra cosa.